Estados Unidos autorizó este jueves la venta sin receta de una píldora anticonceptiva, algo inédito en el país. Opill, estará disponible en farmacias, comercios y supermercados, así como en línea, anunció la Administración estadounidense de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA).
La agencia estadounidense advierte que las mujeres que hayan padecido cáncer de mama no deben tomar esta píldora, que solo contiene progesterona.
Más de un centenar de países ya permiten la venta libre de píldoras anticonceptivas, según la coalición de organizaciones Free the Pill (Liberen la píldora).
Sin embargo, en Estados Unidos (EEUU) el anuncio llega en un momento en que el ala dura de los conservadores se opone al derecho al aborto, que está prohibido en varios estados.
La píldora, fabricada por la compañía farmacéutica HRA Pharma, recientemente adquirida por Perrigo, está autorizada desde hace años en el país, pero con receta.
Precio por determinar
Estará disponible "a partir del primer trimestre de 2024", informó Perrigo, en un comunicado.
Se desconoce su precio pero tendrá que ser "asequible y estar cubierto por el seguro médico", señaló Free the Pill en un comunicado, en el que califica de "histórica" la decisión de la FDA conseguida tras dos décadas de presión.
Podría "transformar el acceso a la contracepción", subrayó esta coalición de expertos.
En Estados Unidos (EEUU) casi la mitad de los 6,1 millones de embarazos anuales son no deseados, afirma la FDA, que añade que se asocian a más "resultados negativos", como por ejemplo un mayor riesgo de no recibir atención prenatal, partos prematuros y complicaciones de salud para el bebé una vez nacido.
Según los expertos, la decisión de la FDA podría tener un gran impacto en las adolescentes, a las que les puede resultar más difícil ir al médico.
Esta medida también podría facilitar el acceso "a quienes se enfrentan a más barreras en nuestro sistema sanitario, como las personas LGBTQIA+, las personas de color y quienes tienen que trabajar para llegar a fin de mes", afirmó la médica Lin-Fan Wang, citada en el comunicado de Free the Pill.
En mayo, un comité consultivo de expertos convocado por la FDA votó unánimemente a favor de autorizar la venta libre de esta píldora, alegando que los beneficios superaban los riesgos.
La pastilla anticonceptiva, que debe tomarse todos los días a la misma hora, impide que la mujer se quede embarazada. Se diferencia de la píldora abortiva, que se toma una vez confirmado el embarazo para interrumpirlo.