La magia en los carnavales de Brasil no tiene fin en el Sambódromo de Rio: cuando se cree haber visto el diseño más creativo o el atuendo más minuciosamente elaborado, aparecen otros que lo superan todo. Es lo que ocurrió en el segundo y último día de desfiles en la icónica pasarela, con su despliegue apoteósico de música, brillos y colores.
Pero los desfiles en Sapucaí, como se conoce popularmente al Sambódromo, pertenecen a los cariocas, que los sienten parte de su identidad.
Cada escuela contaba una historia de la cultura de Brasil
Portela, una de las doce escuelas del "grupo especial", hizo un alegato contra la esclavitud contando la lucha de una mujer, narrada en el libro "Um defeito de cor", de Ana Maria Gonçalves, premio Casa de las Américas de la literatura de Brasil.
Surgida en Madureira, un barrio popular en el norte de Rio, Portela celebró su centenario el año pasado y es la que atesora más títulos, 22.
La legendaria cantante Maria Bethania sorprendió al abrir el show de Mangueira, que estuvo consagrada a Alcione, una de las más grandes sambistas de Brasil.
"No dejes la samba morir, no dejes la samba acabar, el morro fue hecho de samba, samba para que podamos bailar", corearon al unísono las miles de almas presentes, entre ellas la propia Alcione.
El legado de la samba en las sociedades
La escuela de samba marca la vida cultural y social del barrio, muchas veces pobre, donde nació. Cada formación tiene unos 3.000 miembros, que se sienten honrados de pertenecer a ella. Todos, hasta los que empujan los monumentales carros, lo hacen felices, cantando y saltando.
Mocidade fue la encargada de abrir la jornada e invitó a homenajear al cajú, una fruta típica muy apreciada. Su samba compuesta para la ocasión se convirtió en el hit del verano.
"Es perfecto que homenajee una fruta nuestra, brasileña. Toda la familia puede cantar la letra", dijo a AFP poco antes de empezar a desfilar Sandra Araújo, de 37 años, que dijo "amar" el cajú.
Tras sonar sin pausa por horas, el golpe de tambores se apagará al alba hasta el próximo carnaval.