Afganistán ha perdido cerca del 60% de sus periodistas, especialmente mujeres, desde que los talibanes ascendieron al poder hace un año, según un sondeo publicado por Reporteros sin Fronteras (RSF) este viernes.
Del total de 547 medios de comunicación activos en el país hace un año, 219 cesaron de trabajar, según la oenegé.
Las mujeres periodistas han sido las más afectadas: el 76% perdió su trabajo.
Solamente 656 mujeres siguen trabajando en el periodismo, la vasta mayoría de ellas en Kabul.
El 15 de agosto de 2021 las tropas estadounidenses abandonaron precipitadamente Kabul, dejando atrás un caos político y una crisis humanitaria.
A pesar del boicot de la comunidad internacional, los talibanes mantienen un férreo control sobre la sociedad.
"Las autoridades deben comprometerse con el fin de la violencia y el acoso a los trabajadores de los medios de comunicación, y deben permitirles desempeñar su trabajo sin trabas", añadió.
Para acosar a las mujeres periodistas y obligarlas a dejar su trabajo, los fundamentalistas afganos las acusan de inmoralidad.
"Trabajan en unas condiciones que son física y mentalmente violentas y agotadoras, sin ninguna clase de protección", añadió.
Algunos medios han tenido que dejar de emitir música, y otros han visto sus fuentes de financiación exterior canceladas.
Un decreto emitido el mes pasado por el líder supremo Haibatulá Akhundzada prohibió "la difamación y la crítica de responsables gubernamentales sin pruebas".
Como mínimo 80 periodistas han sido detenidos en el último año, y tres de ellos se encuentran actualmente encarcelados, indicó RSF.
Afganistán se encuentra en la 156ª posición en términos de libertad de prensa, de un total de 179 países, según RSF.