El doctor Iván Sierra Robles, neonatólogo condenado a 60 meses (5 años) de prisión por su implicación en la muerte de 9 neonatos por la administración de heparina con alcohol bencílico, en el año 2013, salió en su defensa y presentó su versión de los hechos. “Las funciones que me imputan no están en mis roles” Declaró.
Según la Ley 1 de 2001 y los reglamentos de la Caja de Seguro Social, la dispensación de medicamentos es una tarea que corresponde a los farmacéuticos, no a los médicos.
Responsabilidad en la muerte de los neonatos
Sierra reiteró que sus funciones como jefe de la sala de neonatología eran principalmente administrativas y de supervisión del personal médico y técnico. Asegura que no tenía injerencia directa en la compra o administración de medicamentos, ya que estas eran funciones asignadas al personal de farmacia.
Sobre la sentencia
El doctor Sierra sostiene, que el juicio no demostró un hecho punible, claro en su contra. Argumenta que la base de toda sentencia debe estar fundamentada en pruebas sólidas y, en su caso, las pruebas no fueron suficientes para establecer su culpabilidad.
Según él, el proceso ha puesto de relieve que las funciones que se le atribuyen no estaban dentro de sus responsabilidades, y que, por lo tanto, no debería ser el único imputado.
¿Hubo más responsables?
El doctor Sierra expresó, que no siente que sea el único culpable de las tragedias ocurridas. Cree que el proceso judicial no ha identificado a todas las personas que podrían tener responsabilidad en el caso. Sostiene que su condena puede estar basada en una falta de pruebas suficientes y que podría haber otros implicados que no han sido investigados adecuadamente.
