Edgardo Díaz, proveedor de Minera Panamá, compartió la difícil situación económica que enfrentan los más de 100 proveedores que dependen de la operación minera. Díaz, quien antes suministraba comida rápida para los empleados de la mina, destacó la transición de su empresa de ser una pequeña organización con 15 empleados a una que actualmente tiene solo uno, enfrentando una crisis que podría llevar a su cierre en los próximos dos meses.
"Las comunidades aledañas, como Coclé y Chiriquí, que dependían de la mina, están sufriendo enormemente", añadió Díaz. A su juicio, el impacto de las decisiones pasadas del gobierno, sumadas a la incertidumbre generada por la falta de acciones claras, ha repercutido en la economía nacional.
Criticas a la Mina
Asimismo, Díaz destacó las críticas hacia la minería durante las elecciones y la desinformación sobre el proyecto minero, que, según él, era "100% responsable" y aportaba al Producto Interno Bruto del país. La falta de comprensión sobre los beneficios de la minería ha contribuido a una "campaña negativa" que, según Díaz, aún impacta al sector.
Sobre el futuro, Díaz dejó en claro que reactivar la mina no será una tarea fácil ni rápida, pues podría tomar hasta un año. "No es tan fácil como decir que vamos a abrir para cerrar", concluyó, haciendo un llamado urgente para encontrar soluciones que protejan los empleos y la economía local.