En el marco de las discusiones sobre el futuro de la Caja de Seguro Social (CSS), Francisco Bustamante, exsubdirector de la entidad, señaló que persisten algunas posturas inamovibles entre algunos sectores involucrados en el diálogo, mismas que no han cambiado en décadas. Según Bustamante, aunque algunos grupos han reconocido la necesidad de ajustes, la resistencia a modificar el modelo de gestión de la CSS, excepto en aspectos administrativos, sigue siendo un tema de divergencia que se pondrá de manifiesto esta semana.
Uno de los principales problemas señalados por el exfuncionario es la baja base salarial sobre la cual se aplica la tasa de reemplazo de las pensiones. "Más de la mitad de los trabajadores gana menos de 800 dólares de pensión, y con el aumento en el costo de la vida, esto representa un verdadero problema", advirtió.
Bustamante también mencionó la creciente presión sobre el programa de $120 a los 65 años, que se verá afectado por el elevado nivel de informalidad laboral en el país. "Al final del día, todo se financia con los ingresos de los trabajadores o con los impuestos de los ciudadanos. Es una ecuación muy difícil y una desigualdad que debe resolverse", explicó.
Semana clave en el diálogo
Esta semana será clave en el diálogo, según Bustamante, ya que se trabajará en la homologación de las distintas propuestas, que serán agrupadas en matrices y presentadas a la ciudadanía. El objetivo es encontrar puntos de coincidencia, pero enfatizó que las soluciones propuestas deben ser sostenibles y financieramente viables.
Entre los temas discutidos hasta ahora, las únicas medidas paramétricas que se han abordado han sido relacionadas con la cuota obrero-patronal. Sin embargo, persisten diferencias entre los sectores, con las enfermeras y el empresariado proponiendo ajustes en la densidad de las cuotas y en la edad de jubilación, mientras que la mayoría de los grupos, salvo los empresarios, apoyan la fusión de los programas de pensiones mixtos.