El director general de la Policía Nacional, Jaime Fernández, ofreció un balance detallado sobre la Operación Omega, desplegada en la provincia de Bocas del Toro para restablecer el orden público tras más de 50 días de protestas y cierres de vías. Fernández aseguró que la intervención ha sido progresiva, con uso controlado de la fuerza, y negó que se hayan cometido abusos: “Nosotros no reprimimos, nosotros controlamos”.
Aprehendidos en Operación Omega
Hasta la fecha se han registrado 49 aprehensiones, y al menos seis funcionarios han resultado heridos. El director confirmó que 16 personas detenidas ya fueron enviadas a centros penitenciarios con medida preventiva.
Menor fallecido en protestas
Fernández aclaró que el caso está bajo investigación del Ministerio Público, pero recalcó que fue atendido por paramédicos del SUME y trasladado por una unidad del SENAFRONT desde un potrero donde se encontraba herido: “Se han dicho muchas cosas en redes sociales que no son ciertas. No vamos a dejar que nada quede sin esclarecer”.
Denuncias sobre uso excesivo de gases lacrimógenos
Fernández afirmó que las unidades han enfrentado ataques con fuegos artificiales, piedras y bombas molotov desde zonas altas, y que el uso de agentes químicos ha sido proporcional a la amenaza. “Actuamos respetando los derechos humanos”, reiteró.
El director finalizó indicando que el objetivo es restablecer completamente la movilidad y garantizar la seguridad tanto de las comunidades como de las unidades desplegadas. Aseguró que continuarán colaborando con las autoridades judiciales para esclarecer los hechos y transparentar el accionar policial.
