El Arzobispo de Canterbury viajará a Centroamérica a finales de mayo y principio de junio para visitar iglesias anglicanas, comunidades ecuménicas y líderes religiosos y políticos en cuatro países de esa región.
En ambos eventos, acompañarán al Arzobispo de Canterbury, Justin Welby, dignatarios y miembros de las congregaciones de la Iglesia Episcopal de Panamá.
Presencia anglicana
Organizado por el Reverendísimo Juan David Alvarado Melgar, Primado de la Iglesia Anglicana en Centroamérica (IARCA) y Obispo Diocesano de El Salvador, el Arzobispo Justin pasará 12 días en Guatemala, El Salvador, Panamá y Costa Rica. Será la primera vez que realiza una visita oficial a El Salvador, Panamá y Costa Rica.
Esta será una oportunidad para alabar a Jesús junto a cristianos en estos países vibrantes y variados, con visitas previstas a catedrales e iglesias locales que están difundiendo la palabra de Dios en sus comunidades. Se celebrará una Eucaristía con comunidades indígenas en Guatemala, y en El Salvador, está previsto un peregrinaje al sitio del martirio de San Romero y a la cripta donde está enterrado.
Visita al Canal
Con un enfoque en el a menudo devastador impacto del cambio climático en la región, el Arzobispo visitará el Canal de Panamá - afectado por la sequía, al igual que un Bosque de la Comunión Anglicana (Anglican Communion Forest) en El Salvador para celebrar los frutos de los compromisos ambientales asumidos en la Conferencia de Lambeth en 2022. Dado que la región también se ve afectada por la migración masiva, él se reunirá con personas que trabajan en escuelas, iglesias y organizaciones benéficas para apoyar a las personas desplazadas por el cambio climático y los delitos violentos.
De cara a la visita, el Arzobispo de Canterbury dijo: "Centroamérica es una región rica en cultura, historia y biodiversidad, con millones de cristianos que viven y alaban en diferentes comunidades y denominaciones. “Espero con gran interés nuestra visita por Guatemala, El Salvador, Panamá y Costa Rica, reunirme y rendir culto con nuestras hermanas y hermanos que aman y dan testimonio de Jesucristo.”
“Es una parte del mundo afectada desproporcionadamente por el cambio climático, que afecta la salud y la seguridad alimentaria y al mismo tiempo daña las economías y los ecosistemas, con millones de personas obligadas a emprender peligrosos viajes hacia nuevas vidas. Combatir esto es trabajo de la Iglesia, ofreciendo apoyo a los necesitados, así como protegiendo el precioso entorno natural a través de iniciativas como los Bosques de Comunión (Anglican Communion Forest), que señalan esperanza y restauración. Estoy emocionado de presenciar la obra del Espíritu Santo en estas comunidades”.