La sonda Voyager 1, el objeto más alejado de la Tierra fabricado por el ser humano, ha transmitido datos legibles por primera vez en cinco meses, informó este lunes la NASA.
Pero los equipos de la NASA pudieron seguir enviándole órdenes y la sonda, que fue lanzada hace más de 46 años, siguió funcionando con normalidad.
El problema se debió a un chip de uno de los ordenadores de a bordo, encargado de formatear los datos científicos y técnicos antes de enviarlos a la Tierra.
Finalmente, se encontró una solución ingeniosa y la NASA ha podido comprobar el estado de la nave por primera vez desde noviembre.
Junto con su gemela Voyager 2, las dos sondas son las únicas que han viajado por el espacio interestelar. Llevan a bordo grabaciones de sonidos e imágenes de la Tierra en placas de oro y cobre.