La primera ministra de Dinamarca, Mette Frederiksen, reafirmó el jueves la soberanía sobre Groenlandia durante una visita a la isla y advirtió a Estados Unidos que "no puede anexar otro país".
"No puede anexar otro país", declaró la dirigente danesa en inglés, asegurando que estas amenazas no pueden basarse en un argumento de seguridad, razonamiento que emplea el presidente estadounidense para justificar esta aspiración.
"En materia de seguridad, hay muchas cosas que nosotros y ustedes podemos hacer", afirmó Frederiksen.
La presión estadounidense se intensificó a finales de marzo, cuando el vicepresidente JD Vance visitó la única base militar de la potencia norteamericana en este territorio ártico.
Durante ese viaje, Vance afirmó que Dinamarca "no ha hecho un buen trabajo para garantizar la seguridad de Groenlandia".
Frederiksen insistió en que su país está reforzando su presencia en la isla con nuevos buques polares, drones de largo alcance y mayores capacidades satelitales.
"Respetamos nuestros compromisos, y otros nos seguirán", declaró la primera ministra, señalando que la seguridad del Ártico siempre ha sido una "tarea común".
Su visita se produce poco después de la formación de un nuevo gobierno de coalición en Groenlandia, que agrupa a cuatro de los cinco partidos representados en el parlamento local, bajo el liderazgo del partido Los Demócratas, de centroderecha.