Paris, Francia | AFP | 05 Enero 2019
Una vez más, los "chalecos amarillos" escogieron para su movilización denominada "VIII Acto" concentrarse en los Campos Elíseos, lugar emblemático de su protesta, para hacer escuchar sus quejas en una asamblea general improvisada.
Con un megáfono que pasaba de mano en mano, bajo la atenta mirada, de lejos, de la policía antidisturbios, fueron multiplicando sus reclamos. "Vendremos hasta que Macron ceda. Nosotros queremos el referéndum de iniciativa ciudadana y medidas a favor del poder adquisitivo", lanzó Belinda, una ama de casa de 31 años.
Al principio eran pocos, pero el grupo fue creciendo progresivamente y cerca del mediodía intentaron descender por los Campos Elíseos antes de toparse con una barrera de los antimotines que los frenó y empezó así a subir la tensión
Así, alrededor de 1.500 personas se sumaron al cortejo que, al son de chiflidos y consignas pidiendo "Macron dimisión", avanzó hacia el céntrico barrio donde se encuentra la estación de metro y trenes Saint-Lazare.
Simone, una veterana de 84 años, que caminaba con un abrigo muy costoso, se solidarizaba con el movimiento. "Está muy bien (la protesta), pero no voy a ir a manifestar con mi abrigo de visón, podrían quitármelo", dijo sonriendo.
Como siempre desde el inicio del movimiento, el jefe de Estado es el objetivo de los manifestantes que claman por "resignación" cuando no pronuncian palabras insultantes contra él.
Después de detenerse en la Place de la Bourse, frente a la sede de la AFP, el cortejo llegó al Hôtel de Ville, la alcaldía de París, donde se encontraron con otros "chalecos amarillos" que tenían planeado marchar hacia la Asamblea Nacional. Allí la procesión cobró impulso y creció hasta 3.500 personas, según la prefectura de policía.
Fue en ese punto donde estallaron los primeros incidentes. Alrededor de las 14h00 locales (13h00 GMT), en las orillas del Sena, entre la Place du Chatelet y la alcaldía, los manifestantes arrojaron botellas y piedras a la policía que respondió con gases lacrimógenos, observó un periodista de la AFP.
FUENTE: AFP