Pekín, China | AFP | lunes 25/0 de enero de 2021.
Una explosión ocurrida el 10 de enero en una mina de oro de Qixia, en la provincia de Shandong (este), bloqueó a 22 mineros a varios cientos de metros de profundidad.
Desde entonces, la situación de los mineros y la operación de rescate llevada a cabo genera una enorme emoción y atención mediática en todo el país.
Un minero murió la semana pasada debido a las heridas que provocó la explosión. Y el domingo, 11 trabajadores fueron rescatados con vida ante las cámaras de la televisión nacional.
Pero a pesar de los "esfuerzos incansables" de los socorristas, "desgraciadamente nueve mineros fueron hallados muertos", y sus "cuerpos fueron recuperados", indicó ante la prensa Chen Fei, el alcalde de Yantai, la ciudad qui administra Qixia.
Las tareas de rescate continúan para hallar al último minero atrapado, de quien no hay noticias por el momento.
Las esperanzas son muy pocas: este trabajador muy posiblemente no ha comido en dos semanas, y los socorristas no saben dónde se encuentra.
- Muestras de ADN -
La deflagración obstruyó el pozo de ventilación y dañó el teleférico que permitía a los mineros subir a la superficie.
Un contacto había sido establecido hace una semana con un grupo de diez mineros, atrapados a unos 580 metros de profundidad.
Gracias a un cable metálico que fue introducido a través de un conducto perforado en la roca, los socorristas pudieron enviar víveres, medicamentos y teléfonos a este grupo de mineros hallados.
El domingo por la mañana, los enormes obstáculos que obstruían el pozo cayeron al fondo, lo que facilitó que los mineros fueran subidos a la superficie.
"Cada minero (rescatado) es objeto de una atención particular y está acompañado por un equipo médico, con apoyo psicológico", indicó el alcalde de Yantai.
"En cuanto a las personas muertas, equipos de la policía científica están retirando pruebas de ADN para confirmar su identidad", subrayó.
- "Acelerar la investigación" -
El alcalde prometió por otra parte aclarar las causas de la tragedia en la mina que pertenece a la empresa local Shandong Wucailong Investment.
"Vamos a acelerar la investigación sobre las causas del accidente (...) para dar a las familias de las personas fallecidas y a todos explicaciones satisfactorias lo más rápido posible", subrayó Chen Fei.
Los socorristas perdieron un tiempo vital justo después del accidente, ya que recién se hizo público al día siguiente.
Dos responsables de la ciudad de Qixia -el jefe local del Partido Comunista y el alcalde- ya presentaron su renuncia por este retraso.
Aunque la seguridad de las minas ha mejorado considerablemente en las últimas décadas, todavía hay muchos accidentes en China donde a menudo son ignoradas las medidas de seguridad.
En diciembre, 23 mineros perdieron la vida en una mina de carbón en Chongqing (suroeste).
FUENTE: Agencia AFP