Tras 15 días de haber protagonizado cierres en la frontera con Costa Rica, funcionarios de aduanas volvieron a realizar un paro de labores que impidió el paso al transporte de carga y turismo desde o hacia Centroamérica para exigir el pago de bonos por producción que les adeudan. El funcionario Luis Troya, aseguró que los pagos fueron contemplados por ley y un decreto no puede pasar por encima de eso, ya que son fondos de la propia institución. "Nosotros como funcionarios nos vemos obligados a hacer este tipo de presión, precisamente porque se está obviando la ley 30 que se aprobó hace mucho tiempo", mencionó.
En el resto del día no se hicieron los trámites a ningún vehículo. Funcionarios habían manifestado que permitirían el paso de insumos médicos o situaciones de urgencia. Turistas que venían desde Centroamérica se quejaron por la medida que los mantenía atrapados en el recinto aduanero.
Jorge Arguero, ciudadano costarricense, manifestó que transportaba a un grupo de estudiantes del centro de educación artística de Liberia desde Guanacaste para una presentación que tenían que realizar en la Chorrera.
Otros visitantes que venían desde Costa Rica se quejaron porque tenían que permanecer en el recinto aduanero sin posibilidad de pasar hacia Panamá.
Situación similar ocurrió con los transportistas de carga de ambos lados que perdieron el día, lo que genera gastos excesivos y atrasos en la entrega o búsqueda de mercancía.
Tanto la Cámara de Comercio de Chiriquí, como la de Paso Canoas lamentaron la situación de cierre, sobre todo en momentos en que el país busca una recuperación económica. Estiman que en promedio se pierden 5 millones de dólares diarios si la frontera se mantiene cerrada.