El Consejo Empresarial Logístico (COEL), la Cámara de Comercio, Industria, Agricultura y Turismo de Chiriquí (CAMCHI), productores y transportistas de carga han expuesto ante autoridades del gobierno un informe sobre las pérdidas millonarias generadas por los constantes cierres de la carretera interamericana. Alberto López, presidente del COEL, informó que a nivel de Chiriquí un cierre de la interamericana, que afecta el flujo hacia Costa Rica, Centroamérica y viceversa está generando pérdida de $6 a $7 millones de dólares, pero a nivel del país se estaría hablando de unos $40 a 45 millones diarios.
Felipe Venicio Rodríguez, presidente de CAMCHI, señaló que: "en mi opinión, a veces hay que cambiar un poquito el proceso para que se les pueda dar respuesta a la comunidad y que no quede de un acuerdo a una ejecución y se pierda ese eslabón causando frustración entre las personas que le damos la razón, pero no le damos la razón en la reacción de cerrar la carretera a todo un país de 4 millones y medio de habitantes, además de Centroamérica que son 45 millones de habitantes adicionales", dijo.
La población en general también fue considerada como parte afectada. Las autoridades invitadas a esta mesa de trabajo aseguraron acciones en contra de los cierres de calle e hicieron una invitación de diálogo a los manifestantes.
Cristobal Tuñón, secretario general del Ministerio de Gobierno, indicó que dentro de las circunstancias críticas se debe tener paz, capacidad de diálogo y se puedan llevar soluciones que probablemente no serán del momento pero pueden desarrollarse en etapas para no afectar a terceros.
Los cierres se dan principalmente por grupos indígenas de la comarca Ngäbe-Buglé que exigen construcción de escuelas, carreteras, centros de salud, sistema de agua potable y electricidad entre otros y que justifican sus protestas en el incumplimiento por parte de los funcionarios de gobierno.