LALALANDIA. Bueno, ya. Despertemos de la anestesia que provoca el agüita, la música y los tragos, que seguimos como en letargo. De vuelta a la realidad, a la congueadera. Contralor, ¿como para cuándo la auditoría de las partidas circuitales (completa y con beneficiarios finales, por favor) y la de los contratos de la Asamblea? Diputados, ¿para cuándo el detalle de los $30 mil que por mes tiene asignado cada uno para pagar sus favores políticos? Procuradora, ¿para cuándo Blue Apple? Ya se acabó el fuero que cubría la impunidad de Pepe Suárez y de Jimmy Ford. ¿Esas detenciones como para cuándo? ¿Y como para cuándo tendremos más información de ese caso? ¿O es que las delaciones quedarán en dilaciones y en premios para los delatores? Ah, no, verdad que eso solo pasó entre 2011 y 2012 y no hay ningún panameñista involucrado… Y en el caso Odebrecht, seguimos esperando a que María Lourdes Estrada, del segundo tribunal superior falle. Si eso no pasa, jamás podremos conocer la lista de los coimeados por la empresa que sigue contratando con el Estado. Nuestros jueces cuando no fallan, nos fallan.
TIEMPO BIEN INVERTIDO. Ya el Tribunal de Atlanta mandó los tiempos que tiene la fiscalía para apelar y los abogados para contestar. En 42 días ese caso está listo. Eso es usar bien el tiempo de la justicia. ¿Cuánto tiempo hubiera demorado eso en Panamá? No solo el anuncio sino la resolución del caso… Ah y allá, todo publicado en la web. Acá unos le echan la culpa a los otros por cada bobada, nunca nos enteramos de nada y así nos pasan los años mientras los corruptos se ríen de nosotros.
‘COGÍO POR LA YAYA’. Camacho sigue cogío por la yaya como diría su jefe. Ayer seguía insinuando que algún trato había tenido que hacer Varela con los estadounidenses a cambio de guardar por más tiempo a Martinelli. Oiga Camacho, Varela no manda ni en Panamá, va a venir a mandar allá. Y como si Trump le haría caso. No se hace caso ni a sí mismo… Lo otro que dijo Camacho ante la sanción de la ley de los derechos humanos fue que el chiste de la semana es que a Varela le importen los derechos humanos. Bueno Camacho, no olvidemos por qué Martinelli está preso. Por los pinchazos, o sea, por violar derechos humanos. No deje que su amor lo ciegue…
FICHAS PERDIDAS. Siguen las inconformidades por parte de los precandidatos por las sanciones por los supuestos incumplimientos a la veda electoral. Y aquí hay de lado y lado. Por una parte, no hay candidatos todavía. De ningún partido, porque todavía ningún partido ha hecho primarias. Así que lo que hay son solo aspirantes. Y en cuanto a los independientes, todavía no se ha decidido cuáles serán los tres que finalmente correrán. Otra vez, precandidatos. Aspirantes. Por otra parte, no es lo mismo poner un nombre que un nombre y un eslogan. O un número de teléfono. O una promesa. ¿Dónde está la línea entre los derechos ciudadanos y de expresión, y la búsqueda de apoyo electoral? Por ejemplo: ¿ustedes saben que los presidenciales independientes podían pedir firmas en estos carnavales, pero sin decir que era para que corrieran? ¿Qué sentido tiene eso? Al final hubo un montón de políticos que dieron los mismos apoyos (y por apoyo entiéndaseplaya suya y mía) que dan todos los años, ya sea a las juntas comunales o a las reinas, pero lo hicieron calladitos. ¿Entonces de qué hablamos? Lo que se quería lograr con la ley, que era la igualdad y la transparencia, no se está logrando. Hay candidatos recibiendo donaciones barrani (o sin reportarlo) porque es inevitable: ya hay actividades y hay gastos, y si no lo hacen se quedan atrás. Magistrados: ¿por qué no salen a explicar las reglas y su aplicación, con detalle y claridad? Lo necesitan no solo los políticos. También los ciudadanos.
OÍDOS SORDOS. La semana pasada la ONU le pidió a Panamá aprobar la ley de salud sexual y reproductiva y hacerla de obligatorio cumplimiento en las escuelas, porque ya es claro, hasta para el mundo, que la falta de esa ley está haciendo que Panamá no cumpla con los estándares de la Convención de los Derechos del Niño, el tratado que firmamos en 1990. Y a pesar de esa declaración de la Onu la semana pasada, aquí no pasó absolutamente nada. Nada. Y no solo no pasó nada, sino que por ahí circula un video bastante subido de tono entre por lo menos siete jóvenes toqueteándose, que tampoco parece haber alarmado a las autoridades. Con todo y que Orlando Quintero ya se está quedando sin voz advirtiendo que 30 mil panameños carnavalearon sin saber que son portadores del VIH y que aquí se mueren de una a dos personas por día de sida. Este tema es serio y no hay un solo diputado, uno solo, que le dé la importancia que este asunto merece. Todos prefieren ser ciegos, cómodos y cómplices. Por eso y tantas otras cosas, no a la reelección.
¿Y ENTONCES? Varela, que anda por Chicago atendiendo asuntos universitarios del hijo y vuelve el lunes, se va de viaje con la canciller otra vez a fin de mes. Esta vez el viaje es a Dubai, a un foro de negocios. ¿Hasta cuándo la viajadera del presidente y la vicepresidenta juntos, cuando la principal función de un vicepresidente es reemplazar al presidente en sus ausencias? Si fuera algo trascendental, todavía… ¿pero a un foro de negocios?
SALUDITOS. Y los saluditos de hoy le van a Mario Lazarus, que hoy tiene la audiencia de imputación de cargos. A ver si de eso no se da a la fuga…
A Navarro, positivos, porque hay que reconocerle que es el único político que está tratando de crear consciencia para que no acaben con Coiba.
A la cacica Silvia Carrera, que andaba como perdida y ahora sale diciendo que el gobierno le ha incumplido a los ngabes.
A los diputados, a ver si en estos días discuten el proyecto del hemocentro, que se presentó en agosto y, como no les da capacidad para maniobrar políticamente, nada que la discuten.